13 de diciembre de 2017

Asturias «punta de lanza» industrial

Cuarenta años, crónica regional (1937-1975)
Vista de Mieres desde La Rebollá, se ve la Fábrica de Mieres. Foto: Jubar. La Nueva España
El régimen de Franco en el Principado, que pasó de la represión a convertirse en la punta de lanza industrial del país
Franco, durante la inauguración de un alto horno de Ensidesa el 10 de agosto de 1966. LNE
La Nueva España
El franquismo fue implacablemente uniforme en toda España, pero eso no quiere decir que este período histórico de casi cuarenta años no tenga sus notas diferenciadoras en Asturias. La región fue quizá la que con mayor brutalidad sufrió la saña de la represión. No en vano, la Asturias roja se había convertido en uno de los mitos del movimiento obrero, tras la Revolución de 1934 y la Guerra Civil. Pero el régimen de Franco no cometió el error de abandonarla a su suerte, sino que recibió una atención especial que hizo de Asturias una de las puntas de lanza industriales del país, todo ello acompañado de un paternalismo del que la región tardó en desprenderse. Fue, sin embargo, en Asturias donde se reavivó el problema obrero en los años sesenta y donde creció uno de los polos de oposición en los últimos años del régimen.

12 de diciembre de 2017

El gigante que desbordó el marco empresarial asturiano

Ensidesa, el difícil empeño
1952. Aéreo de Avilés. A la izquierda relleno de MARISMAS para la instalación de ENSIDESA. (Foto gentileza de Ricardo García Iglesias). Foto coloreada. El Comercio.

Está reiteradamente escrito que el nacimiento de ENSIDESA se produce por el Decreto de la Presidencia del Gobierno de 15 de Junio de 1950, firmado por Francisco Franco, por el que se encomienda al INI la organización de un Centro Siderúrgico con capacidad de producción de hasta 600.000 toneladas de productos terminados
Un documental dirigido por Isaac Bazán Escobar, estrenado en Avilés el 7 de febrero de 2015, cuenta las penurias de la generación de obreros inmigrantes que trabajaron en la construcción de ENSIDESA en los años cincuenta del pasado siglo, y que en algunos casos dejaron la vida en aquella peligrosa tarea. RTPA.

Asturias Mundial.
El Decreto tiene solamente 4 artículos y en la parte expositiva se reitera, en el difícil empeño, la necesidad de una importante industria siderúrgica para el desarrollo del país así como la voluntad de traspasarla a la iniciativa privada cuando alcance su pleno desarrollo. El bautismo legal se recoge en escritura pública del 15 de julio y el denominado Centro Siderúrgico pasa a titularse Empresa Nacional Siderúrgica S.A., con un capital de 1000 millones de pesetas, cifra realmente importante para la época. Eustaquio Fernández Miranda fue nombrado vicepresidente, en funciones de presidente desde 1950 hasta 1957 y Félix Aranguren fue designado Consejero gerente, cesando en 1956, siendo sustituido por Manuel Ocharan. Félix Aranguren fue un experto siderúrgico adelantado a su época. Estrecho colaborador de Suances, le corresponde el mérito de la planificación de la primera etapa y de la dirección de las obras y montaje de las instalaciones en tiempos especialmente difíciles. Director de la Escuela de Ingenieros de Minas de Madrid, trajo a ENSIDESA a sus alumnos más aventajados, enviándolos al extranjero para su especialización. Nombres de momento fueron Ricardo Díez Serrano, Juan Carlos Paredes, Antonio Fernández Miranda, Alfonso Targetta y otros.

9 de diciembre de 2017

Lo que debiéramos saber de los hórreos asturianos

Los hórreos en Asturias    
OVIEDO - HÓRREO ASTURIANO - L.ROISIN- https://www.todocoleccion.net/postales-asturias/postal-oviedo-horreo-asturiana-foto-l-roisin-sin-circular~x126460135
 ¿Qué futuro les espera a los miles de hórreos de no tanta antigüedad, ni bagaje artístico, dispersos en las fincas y pueblos de la región?
Ver artículo del blog: El hórreo, su historia y su identidad asturiana
HÓRREO ASTURIANO. POSTAL BLANCO Y NEGRO, año 1920
No hay lugar a dudas de que para los asturianos el hórreo es uno de nuestros símbolos de identidad más queridos y representativos. Nuestras vidas están llenas de referencias a este pequeño edificio agrícola, que, en realidad, es un granero, una «construcción donde se recoge y se conserva el grano para su posterior uso o consumo». El hórreo constituye, asimismo, uno de los elementos más importantes de nuestro patrimonio arquitectónico y cultural. Sin embargo, en esta Asturias donde parece que todo se acaba, que casi todo se encuentra en riesgo de extinción, donde las minas se cierran, el mar nos niega sus peces, el salmón no remonta los ríos, la caza no abunda, el oso tiene problemas de fertilidad y al urogallo no se le ve, el hórreo, este pequeño edificio de madera, casita de juegos infantiles y lugar de amoríos de mozas y mozos, también ha entrado en decadencia. En un deterioro continuo y creciente con un lamentable destino final. Cuestión ésta que no es de extrañar, dado que su mantenimiento resulta muy difícil de encajar en las nuevas formas de vida de este siglo de la informática, las redes sociales y de vida virtual.

8 de diciembre de 2017

La última defensa republicana en el norte de España

Memoria del Dunkerque asturiano
Vehículos abandonados en El Musel tras la huida republicana. La Nueva España.

Un extenso trabajo del Grupo Eleuterio Quintanilla sobre el exilio republicano muestra fotos y textos de la época, además de entrevistas con protagonistas
Llegada de un barco con niños y niñas españoles al puerto francés de La Rochelle. La Nueva España.
La Nueva España.
El 24 de agosto de 1937, en plena Guerra Civil, la rendición incondicional a las tropas italianas que luchaban en el bando nacional, en Guriezo (Cantabria), de los batallones dependientes del Partido Nacionalista de Euzkadi, en el que pasaría a la historia como el Pacto de Santoña, determinó el derrumbamiento de la defensa republicana en el teatro de operaciones del Cantábrico. El 21 de octubre siguiente el ejército nacional entraba en Gijón, terminando así con la última defensa republicana en el norte de España. Ante el desmoronamiento del frente por la traición de los nacionalistas vascos, miles de republicanos evacuaron por mar de Asturias, rumbo a Francia, principalmente desde el puerto de El Musel.