29 de diciembre de 2015

Los ictiosaurios vivieron hace unos 190 millones de años, en Asturias

Villaviciosa, el mar de los ictiosaurios

Laura Piñuela y Marta Fernández junto a parte de los restos fósiles del ictiosaurio más completo hallado en la Península Ibérica. Saber más… El comercio.

La "costa de los dinosaurios" también es un referente de los reptiles que dominaron los océanos jurásicos, con restos de 15 ejemplares, la mitad en el concejo maliayés

(…). Los ictiosaurios eran grandes reptiles marinos con aspecto de pez y delfín. Durante el Triásico, evolucionaron a partir de reptiles terrestres aún no identificados que volvieron al agua, en un proceso análogo al que debieron sufrir delfines y ballenas. Fueron especialmente abundantes en el período Jurásico, hasta que fueron reemplazados como los depredadores acuáticos dominantes en el Cretácico por los plesiosaurios. (…). El nombre fue creado en 1840 por Sir Richard Owen.  Saber más… WIKIPEDIA.

Hubo un tiempo en el que los dinosaurios dominaban la Tierra. La tierra firme. Bajo la superficie del océano, ese cetro lo ostentaron durante 158 millones de años otros reptiles, los ictiosaurios (literalmente "lagartos pez"). El primer fósil de uno de estos animales identificado con certeza fue descubierto hacia 1810 o 1812 por Mary y Joseph Anning en el suroeste de Inglaterra. Desde entonces ha habido numerosos hallazgos en todos los continentes. 

28 de diciembre de 2015

El «estratega» de la transición española

Torcuato Fernández-Miranda y Mieres
Torcuato Fernández-Miranda y Hevia. Duque de Fernández-Miranda. Nacido el 10/11/1915 en Gijón (Oviedo). Fallecido el 19/06/1980 en Londres. Es el último presidente de las Cortes Españolas y el que dio paso a unas Cortes democráticas a través de la Ley 1/1977, de 4 de enero, para la Reforma Política. Retrato pintado por Félix Revello de Toro, 1978. Congreso de los Diputados. (...). Congreso de los Diputados. 

"Soy asturiano por los cuatro costados" era una de sus frases preferidas. El diez de noviembre de 2015, se cumplieron los cien años del nacimiento del insigne político asturiano, Torcuato Fernández-Miranda y Hevia. Aunque con bastante retraso su figura fue glosada y recordada con actos que tuvieron por marco su lugar de nacimiento, es decir, Gijón
Torcuato Miranda, en octubre de 1969 fue nombrado ministro secretario General del Movimiento y fue vicepresidente del gobierno de Carrero Blanco, a partir de cuya muerte (diciembre 1973) asumió de manera interina la Presidencia del Gobierno hasta el 4 de enero de 1974. Foto Archivo. Texto: Congreso de los Diputados.  
Sin embargo el considerado como principal estratega del proceso de transición española del último régimen tecnócrata franquista a los albores de una naciente democracia bajo el sello de la monarquía parlamentaria, pudo haber nacido también en Mieres, dado que, si bien su madre Candela, maestra nacional de profesión que no ejerció, era gijonesa, su padre Manuel, empleado del Ferrocarril de Langreo, era natural y con familia ascendiente oriunda de Mieres del Camino, y el propio Torcuato había manifestado, más de una vez, que "soy asturiano por los cuatro costados y puedo cantarles la canción de "En Mieres del Camino nació mi padre". Pero, en fin, antes de desenmarañar las circunstancias que relacionaron al eminente político con esta tierra cabecera de la comarca del Caudal, vayamos a recordar los pasos más destacados de su trayectoria, posiblemente pocas veces igualada en los tiempos de la era contemporánea en el suelo español.  

27 de diciembre de 2015

El Falangista Asturiano Torcuato Fernández-Miranda y Hevia "1915-1980"

Más de 35 años de la muerte de Fernández-Miranda
Caricatura de Torcuato Fernández Miranda, publicada por La Nueva España. Ilustración de Pablo García Suárez (Gijón, 1964). Como ilustrador publicó su primer dibujo en LA NUEVA ESPAÑA en 1982. Es un caricaturista elegante y preciso y un ilustrador certero e ingenioso en su interpretación de los textos que acompaña. En su larga trayectoria tiene varios premios. Fuente: La Nueva España.

Personaje clave de la Transición, la figura del político gijonés ha sido comparada con la de Jovellanos por su cualificación como hombre de Estado y por la importancia que dio a la educación como vía principal de progreso social
Adolfo Suárez González, Torcuato Fernández Miranda y Manuel Gutiérrez Mellado, políticos en el proceso de democratización de España. El Mundo.
El día 19 de junio de 2015 se cumplieron treinta y cinco años del fallecimiento en Londres de Torcuato Fernández-Miranda y Hevia, Duque de Fernandez-Miranda, sin duda alguna, uno de los gijoneses más ilustres, con notoria influencia en el devenir histórico del siglo XX en nuestra nación. Torcuato Fernández-Miranda nació en Gijón el día 10 de noviembre de 1915 y era el sexto de una familia de diez hermanos (seis varones y cuatro mujeres). Manuel, su padre, era empleado del Ferrocarril de Langreo y Candela, su madre, maestra nacional, sólo ejerció su magisterio como profesora de sus diez hijos, que merced a la base cultural que supo inculcarles llegaron a brillar con éxito en sus respectivas profesiones. Torcuato, que pronto pasó a ser 'Tato' para el resto de sus días, ya obtuvo el Premio Extraordinario en el Bachiller, cursado en el Instituto de Jovellanos, y luego en la licenciatura de Derecho en la Universidad de Oviedo, donde llegó a ser el catedrático, y luegorector, más joven de España. Con su padre y un hermano presos en la cárcel de El Coto, la Guerra Civil fue un auténtico suplicio para una familia cristiana y, según declaraciones de José, uno de sus hermanos: «Mientras nosotros buscábamos comida, 'Tato' se alimentaba tragándose libro tras libro.Yo creo que se alimentaba con ellos».

25 de diciembre de 2015

La iglesia de Santa Eulalia de Ujo (Mieres), monumento histórico nacional

Las marcas del silencio
Iglesia de Santa Eulalia de Ujo (Mieres) en 1920. (Archivo del blog)
Los signos en la construcción de la iglesia de Santa Eulalia de Ujo, monumento histórico nacional, ofrecen visiones sobre su origen
Ilustración de Alfonso Zapico
La Nueva España
En el siglo XII Ujo era uno de esos poblachones que se repartían por Asturias. Lo habitaban siervos, que aunque pagaban sus impuestos se diferenciaban en poco de los esclavos, ya que podían ser vendidos o donados junto a las heredades que trabajaban; también colonos, con la misma vida miserable, pero mayor libertad, y campesinos que cultivaban para otros por contratos estipulados. Sobre ellos dominaba la Iglesia ejerciendo el poder económico y social; determinando desde el calendario a cualquier aspecto de la vida cotidiana y las relaciones personales, ceñidas a las creencias que guardaban el orden con un pensamiento sencillo: el mundo estaba lleno de maldad porque así lo disponía la bondad divina y el mayor pecado -el pecado original- era intentar comprender esta contradicción.